Con el presente número abrimos el Volumen 18 dela RevistaCubanade Alimentación y Nutrición. El volumen 18 contendrá 2 números regulares con contribuciones originales, revisiones temáticas y presentaciones de casos clínicos, y un tercero especial con las actas del recién celebrado IV Congreso de Nutrición Clínica (Santiago de Cuba, 26 – 28 de Abril del 2007). El volumen corriente dela Revistacerrará con un suplemento especial dedicado a las guías prácticas basadas en la densitometría de Rayos X de doble emisión para la evaluación de la composición corporal de sujetos tanto sanos como enfermos, en diversos escenarios de la asistencia médica. Este primer número es único por cuanto recoge varios artículos relacionados con el estado de la desnutrición en áreas hospitalarias pediátricas, y la provisión de cuidados nutricionales a los niños atendidos en nuestras instituciones de salud [RESUMEN TRUNCADO DESPUÉS DE LAS PRIMERAS 250 PALABRAS].

El Comité Editorial de la RevistaCubanade Alimentación y Nutrición me ha pedido mis reflexiones sobre el problema que representa la desnutrición en los hospitales pediátricos, a modo de prólogo del Informe Final de la Encuestade Desnutrición Hospitalaria conducida en el Hospital Pediátrico “William Soler” (institución que dirijo desde el año 2005) por el Dr. Lázaro Alfonso Novo, en respuesta a un pedido del Grupo Cubano para el Estudio de la Desnutrición Hospitalaria. La dirección de un hospital pediátrico en una ciudad como La Habana no resulta una tarea sencilla, para la que existan respuestas prefabricadas en un texto orientador (si ello fuera así, solo le recomendaría al lector que echara a la basura dicho texto). Todos los días hay que enfrentarse, y responder, a los dilemas que resultan del encuentro de las expectativas disímiles que tienen los niños enfermos y sus padres, y los médicos y demás integrantes de los equipos básicos de trabajo de la institución, con los recursos y fondos disponibles. Esta dinámica, siempre mutante, obliga a adoptar enfoques novedosos, a contramano muchas veces de lo aprendido en cursos de dirección y administración de servicios de salud. Siempre le he dado la bienvenida a las ideas frescas que permitan satisfacer todas las expectativas apuntadas anteriormente, y que además incorporen valor agregado [RESUMEN TRUNCADO DESPUÉS DE LAS PRIMERAS 250 PALABRAS].

La estimación de los requerimientos nutricionales del paciente crítico es de interés en el ámbito de los cuidados críticos. Un paciente adecuadamente nutrido es capaz de soportar grades contiendas terapéuticas sin que su estado se afecte gravemente. La capacidad de respuesta a la sepsis, a las maniobras de destete, a ciertos medicamentos, incluso, al tiempo de permanencia en la unidad, dependen en gran medida del estado nutricional previo del paciente. La presencia de desnutrición aumenta hasta en un 40% la mortalidad y morbilidad en las salas de cuidados críticos. Se consigue mayor supervivencia, mejor respuesta inmunitaria, y disminución de los reactantes de fase aguda cuando el apoyo nutricional se inicia precozmente,  independientemente de la vía de administración [RESUMEN TRUNCADO DESPUÉS DE LAS PRIMERAS 200 PALABRAS].