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Vivian Herrera Gómez, Lourdes Rodríguez Domínguez, Santa González O’Farrill, Imilsys La O Herrera, Mayte Mas Gómez, Olga Valdés Almaral, Pedro Morejón Martín, Georgina María Zayas Torriente
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Estado de la calidad de la prestación de cuidados nutricionales a los niños atendidos en el Hospital Pediátrico “William Soler”, La Habana, CubaEn este artículo se presenta el estado actual de la provisión de cuidados nutricionales a lo(a)s 240 niño(a)s encuestados en el Hospital Pediátrico “William Soler Ledea” (La Habana, Cuba) mediante la ENH Encuesta de Nutrición Hospitalaria conducida en Enero del 2007. La frecuencia de desnutrición hospitalaria fue del 30.0%, pero la desnutrición estaba registrada como un diagnóstico independiente en solo el 2.9% de las historias clínicas revisadas. El completamiento de los ejercicios de evaluación antropométrica y bioquímica del estado nutricional fue insuficiente. Aunque el 12.5% de los enfermos encuestados (mediana de las frecuencias observadas en 10 subcategorías; rango: 1.3 – 86.7%) llenaba alguna indicación de intervención nutricional, las terapias de Nutrición artificial (Enteral/Parenteral) se administraron a solo el 4.8% de ellos. Se debe hacer notar que los pacientes con la vía oral suspendida eran sujetos de intervención nutricional, aún cuando constituyeron el 1.3% del tamaño muestral; que el(la) niño(a) fue tallado(a) y pesado(a) al ingreso; y los enfermos con 15 (o más) días de hospitalización fueron pesados prospectivamente. La desnutrición hospitalaria constituye un problema institucional de salud que los equipos básicos de atención fallan en identificar, tratar y en última instancia, prevenir. Se requieren con urgencia programas de intervención nutricional y metabólica que hagan énfasis en la re-educación de los distintos actores involucrados en la provisión de cuidados nutricionales para que asuman, y desempeñen satisfactoriamente, los roles esperados dentro de este proceso, en aras de preservar las tasas genéticamente determinadas de crecimiento y desarrollo del(la) niño(a) enfermo(a).
Lázaro Alfonso Novo, Sergio Santana Porbén
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Comportamiento nutricional del trauma cráneo-encefálico en una unidad de cuidados intensivos de un hospital provincial RCANIntroducción: El TCE Trauma craneoencefálico suele presentarse en pacientes previamente sanos y de buen estado nutricional. Los cambios metabólicos originados por la agresión traumática colocan a estos pacientes en situación de riesgo nutricional, originando señales moleculares y bioquímicas que guardan paralelismo con la intensidad de la agresión. Material y Método: Se realizó un estudio analítico, prospectivo, longitudinal para evaluar el comportamiento nutricional de 67 pacientes con TCE que fueron atendidos en la UCI Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario “Abel Santamaría Cuadrado”, de la ciudad de Pinar del Río, entre Enero-Diciembre del 2006. Se recaudó el diagnóstico principal al ingreso en la UCI, la estadía, y la condición al egreso (Vivo/Fallecido). El estado nutricional se estimó en el momento de la encuesta, y a intervalos regulares durante la estadía del enfermo en la UCI. También se documentaron la ocurrencia de ayuno y los esquemas empleados para el apoyo nutricional. Objetivos: Evaluar la asociación entre el estado nutricional y la intensidad del TCE. Resultados: El 62.7% de los pacientes con TCE estaba desnutrido en el momento de la encuesta. El ayuno frecuente influyó en la aparición de la desnutrición. El 61.6% de los pacientes desnutridos presentó complicaciones durante la estancia en la UCI. La frecuencia de desnutrición se incrementó a medida que se prolongaba la estancia del paciente. Sin embargo, la mortalidad fue mayor entre los pacientes no desnutridos con una estadía menor de 5 días, lo que reflejaría la gravedad del TCE. La Nutrición enteral fue la opción más empleada de apoyo nutricional. Conclusiones: Es insuficiente el aporte nutricional a los pacientes con TCE, lo que conlleva al desarrollo de complicaciones durante la estancia en la UCI.
Richard Small Seoane, Javier Hernández González
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Sepsis, mortalidad y antropometría del brazoSe realizó un estudio prospectivo, analítico, transversal, para evaluar la influencia del estado nutricional del quemado sobre el comportamiento de variables bioquímicas seleccionadas, la ocurrencia de sepsis, y la mortalidad. Se obtuvieron la CB Circunferencia del Brazo y los pliegues cutáneos, los valores séricos de Albúmina y Transferrina, y los CTL Conteos de Linfocitos de 35 pacientes con SCQ Superficie Corporal Quemada ³ 20.0% (Mujeres: 71.4%; Edades > 60 años: 17.1%; Indice SCQ:Estadía: 1.12 ± 0.43; Indice ≤ 1: 36.0%; Mortalidad: 28.6%) atendidos en la Unidad de Quemados del Hospital Universitario Clínico quirúrgico “Dr. Gustavo Aldereguía Lima” (Cienfuegos, Cuba) entre Enero del 2005 y Diciembre del 2006. El paciente se denotó como desnutrido si los valores calculados de las Areas Muscular (AMB) y/o Grasa del Brazo (AGB) fueron menores del décimo percentil de las tablas preexistentes para cubanos del mismo sexo y edad. Los cálculos se realizaron bajo el principio de la “intención-de-tratar”. La frecuencia de desnutrición fue del 8.6% al ingreso en la unidad, pero se incrementó hasta ser del 14.3% en el momento del egreso. La desnutrición se concentró entre los quemados con edades iguales/mayores de 60 años. La frecuencia de valores disminuidos del AMB, la Albúmina, la Transferrina, y el CTL fue mayor al término del estudio. La frecuencia de eventos sépticos fue del 60.0%. La ocurrencia de eventos sépticos fue independiente del estado nutricional del paciente. La mortalidad fue dependiente del estado nutricional. La afectación del compartimiento somático muscular puede asociarse con la mortalidad del paciente quemado.
Juan Sebastián Wong Martínez, Caridad Bécquer González, Marta Patricia Casanova González, Sergio Santana Porbén, Alfredo Vázquez Vigoa, Alfredo Vázquez Cruz
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Consumo y preferencias alimentarias de la población cubana con 15 y más años de edadIntroducción: En Cuba nunca se había realizado una encuesta nacional de consumo de alimentos. Conocer la situación alimentaria del país permitirá emprender acciones para mejorar el cuadro vigente de salud. Objetivos: Caracterizar el consumo de alimentos y las preferencias alimentarias de la población cubana con 15 y más años de edad. Material y método: Se aplicó una encuesta dietética semicuantitativa a 3 426 personas (Mujeres: 54.5%) muestreadas de 98 municipios en las 14 provincias del país, y consideradas como representativas de las áreas urbanas de Cuba. Las preferencias alimentarias de la población cubana se obtuvieron de una submuestra de 1 860 personas (Mujeres: 55.1%) residentes en 7 provincias distribuidas entre el occidente, centro y oriente del país. Resultados: El consumo de fibra dietética, vitamina A, vitaminas del complejo B, hierro, calcio y magnesio fue menor del 70.0% de las recomendaciones. El consumo adecuado de lácteos, frutas y vegetales fue reportado por solo el 11.0%, 16.0% y 17.0% de los encuestados, respectivamente. El 32.0% reveló un consumo excesivo de azúcar. La encuesta de preferencias alimentarias devolvió un patrón similar de comportamiento: solo el 19.0% de los encuestados consumiría vegetales y frutas en las porciones recomendadas, de estar disponibles y accesibles; pero muchos comerían cantidades excesivas de grasas (78.0% de los encuestados), carnes (59.0%), azúcar (51.0%), cereales (31.0%) y lácteos (26.0%). Los patrones de consumo y de preferencias alimentarias fueron homogéneos en todo el país. Conclusiones: El cubano prioriza la satisfacción de las necesidades de grasas, proteínas y azúcar, en detrimento del consumo de opciones sanas como vegetales y frutas. La mala calidad nutrimental, el desequilibrio, y la monotonía caracterizaron tanto el consumo alimentario real, como el deseado. Los malos hábitos alimentarios presentes en la población cubana pudieran influir en el cuadro de salud vigente. Urge capacitar a la población cubana con conocimientos sobre una alimentación saludable, así como aumentar la disponibilidad y accesibilidad a alimentos sanos.
Carmen Porrata Maury
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Georgina María Zayas Torriente, Raquel Castanedo Valdés, Yarissa Domínguez Aylloh, Daris Inés González Hernández, Vivian Herrera Gómez, Xiomara Herrera Argüelles, Margarita Pavón Hernández, María Elena Díaz Sánchez
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Estado del Registro Sanitario de Cuba para Alimentos y CosméticosLos países, sino todos, al menos la mayoría, conducen sistemas de control de la calidad sanitaria de los alimentos y cosméticos que circulan dentro de las fronteras, como parte integral de políticas de seguridad nacional. El reconocimiento del derecho del consumidor a disfrutar de un producto sano y seguro ha resultado en la incorporación de estos sistemas de control en los planes nacionales de desarrollo estratégico, y con ello, la mayor disponibilidad de recursos tecnológicos, financieros y humanos orientados a ofrecer garantías de calidad e inocuidad de los alimentos y cosméticos tanto de consumo nacional como de exportación. El Registro Sanitario de Cuba se ocupa de la evaluación de la calidad sanitaria de los cosméticos y alimentos como acto previo a la entrada al país, distribución, comercialización y venta libre. Durante el 2008 se evaluó la calidad sanitaria de 3,592 productos (Alimentos: 77.7%). Cada producto se documentó mediante un expediente técnico confeccionado según normas aceptadas internacionalmente. Un Comité designado de expertos revisó los documentos incluidos en el expediente técnico, se pronunció sobre la conformidad del mismo, y dictó recomendaciones sobre el destino final del producto. Se aprobó el 68.3% de las peticiones de comercialización y libre venta de alimentos, y el 40.7% de las de cosméticos, respectivamente. La actividad del Registro Sanitario de Cuba garantizó la distribución, comercialización y libre venta de alimentos y cosméticos sanos e inocuos para el consumidor nacional, y con ello, la reducción de las pérdidas por calidad insuficiente, decomiso y rechazo. La actividad del Registro Sanitario de Cuba se ha convertido también en una importante fuente nacional de ingresos económicos.
Rebeca Fernández Gómez, María Victoria Luna Martínez, Olga Valdés Almaral, Niurka Figueredo Castro, Alberto Castillo Pino, Ariadna Calderón Alfonso, José Arcia Torres
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Yenela García Hernández, Raúl González Hernández, Roberto Menéndez Soto del Valle, Maritza González Pérez, Virgilio Bourg Llamo
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Desarrollo de una Unidad Pediátrica de Nutrición Enteral siguiendo las pautas para la creación de grupos de apoyo nutricionalEn este trabajo se describe el diseño y la actuación de la UPNE Unidad Pediátrica de Nutrición Enteral anexa al Servicio de Gastroenterología del Hospital Pediátrico Universitario “Juan Manuel Márquez” (La Habana, Cuba) para la conducción de esquemas de Nutrición enteral a los niños hospitalizados en riesgo de desnutrición. La estructura, organización y funcionamiento de la UPNE se modelaron a partir de los principios elaborados por el GAN Grupo de Apoyo Nutricional del Hospital Clínico-Quirúrgico “Hermanos Ameijeiras” (La Habana, Cuba), verticalizado en la atención de adultos. Los resultados alcanzados con la UPNE se ilustran mediante la evolución de 415 niños atendidos entre 2000-2004, comparada con la de 395 niños no sujetos a Nutrición enteral. La intervención de la UPNE resultó en un acortamiento de la estadía hospitalaria, un menor número de días de antibioticoterapia, y consumo disminuido de antibióticos y complementarios de laboratorio. Conclusiones: Es posible aplicar los principios del trabajo-en-equipo propuestos por el GAN del Hospital “Hermanos Ameijeiras” en el desarrollo de UPNE dentro de hospitales pediátricos, a fin de favorecer la evaluación integral y temprana del estado nutricional del niño, la rápida recuperación nutricional, la disminución de la morbilidad y la mortalidad del niño con alto riesgo nutricional, y la integración de los directivos de salud al equipo médico de trabajo, todo ello con vistas a mejorar la gestión clínico-gerencial hospitalaria.
Rafael Jiménez García, Eduardo Sagaró González, Ronoel Peñalver Valdés, Roberto Alvarez Fumero, Rafael Domínguez Jiménez, María Elena Trujillo Toledo, Sergio Santana Porbén
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Ariadna Perón Collazo, Arelis Pérez Cué, Manuel Jorge Villar Kuscevi, Jesús Barreto Penié, Sergio Santana Porbén
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Lázaro Alfonso Novo, Sergio Santana Porbén
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Estado nutricional de los enfermos incluidos en un programa de hemodiálisis crónica: Factores de riesgo y evolución clínicaEl estado nutricional de los pacientes con Insuficiencia Renal Crónica Terminal (IRC-T) atendidos en el Programa de Hemodiálisis (HD) del Servicio de Nefrología del Hospital Clínico quirúrgico “Hermanos Ameijeiras” (La Habana, Cuba) se estableció independientemente mediante indicadores antropométricos, bioquímicos y la Encuesta Subjetiva Global (ESG). Se examinaron las asociaciones entre el estado nutricional, por un lado, y las variables demográficas y clínicas del enfermo, las características del esquema de HD, y la autonomía funcional. Asimismo, se evaluó la influencia del estado nutricional sobre la morbilidad y la mortalidad del nefrópata sujeto a tratamiento depurador crónico mediante un estudio analítico, prospectivo y transversal conducido entre Febrero del 2004 – Febrero del 2005. El 50.0% de los pacientes recibió puntajes (B + C) de la ESG. El estado nutricional del enfermo se asoció con valores séricos disminuidos de Albúmina y Creatinina. El estado nutricional del paciente podría componer las influencias de noxas como la presencia de infección, depresión y anorexia. El estado nutricional se asoció con una autonomía funcional disminuida. Una mayor proporción de los desnutridos se concentró entre los pacientes con accesos venosos profundos para la administración de la HD, y tasa de catabolismo proteico < 0.8. La tasa de mortalidad fue del 33.3%. El estado nutricional se constituyó en un predictor por sí mismo de mortalidad antes del año de observación. La mortalidad fue predicha independientemente de la presencia de depresión. Es probable que en un nefrópata concurran trastornos nutricionales, depresión, infección, anorexia, y una autonomía funcional disminuida, junto con valores reducidos de la Creatinina y la Albúmina. Se impone una revisión de la estructura, organización y funcionamiento del Programa hospitalario de Hemodiálisis a fin de enfrentar las consecuencias ominosas de la desnutrición asociada a la IRC-T en HD.
Yuleidi Hernández Reyes, Amaury Lorenzo Clemente, Pedro Ponce Pérez, Rolando Aguiar Moreira, Guillermo Guerra Bustillo
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Jorge René Fernández Massó, Sergio Santana Porbén, Norma Silva Leal, Luisa Bustamante Frandenthaler, Julio Pérez García
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Estado nutricional de los niños ingresados en un hospital pediátrico de La Habana. I. Edades entre 0 y 2 añosLos valores corrientes de Talla y Peso de niños y niñas con edades decimales entre 0.1 – 2.5 años atendidos en el Hospital Pediátrico “William Soler” (La Habana, Cuba) se contrastaron con los prescritos en las Tablas Cubanas para el sexo y la edad. Se denotó al niño(a) encuestado como desnutrido si la Talla/Peso < percentil 10 de las Tablas cubanas. La frecuencia de desnutrición hospitalaria fue del 23.8%. El 15.3% de los valores de la Talla, y el 20.2% del Peso, fueron inferiores al percentil 10 de las Tablas cubanas, respectivamente. La Talla y el Peso estuvieron afectados simultáneamente en el 11.9% de los niños y niñas encuestados. La desnutrición fue independiente del sexo o el color de piel. La frecuencia de trastornos nutricionales entre los niño(a)s con edades mayores de 1 año fue del 34.6%. Los trastornos nutricionales se concentraron entre los enfermos del corazón y los vasos sanguíneos, cáncer y afecciones gastrointestinales. Los servicios de Cardiología, Gastroenterología, Cuidados críticos, Hematología, Oncología y Cirugía maxilofacial se distinguieron por las tasas mayores de desnutrición. La frecuencia de desnutrición se incrementó con la estadía hospitalaria, hasta ser del 46.2% para aquellos niño(a)s que acumulaban entre 8 – 15 días de estadía hospitalaria. El riesgo de desnutrirse del niño(a) hospitalizado fue independiente del estado antropométrico. El estudio presente llama la atención sobre la existencia de trastornos nutricionales importantes entre los niño(a)s atendidos en un hospital pediátrico de la ciudad capital del país, y la necesidad de instalar las políticas institucionales para preservar el estado nutricional durante la hospitalización, y asegurar el éxito de la intervención médico-quirúrgica.
Lázaro Alfonso Novo, Sergio Santana Porbén
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Richard Visser
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Elisa Maritza Linares Guerra,, Nadia Acosta Nuñez, Yunit Hernández Rodríguez, José Sanabria Negrín, Everaldo Jerez Hernández, Alina Plá Cru
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Estado de la calidad de los cuidados nutricionales en una unidad de terapia intensiva neonatalLas demoras en el inicio de la provisión de cuidados nutricionales a un recién nacido que así lo necesite lo expone innecesariamente a una situación de urgencia metabólica que altera profundamente los mecanismos de regulación homeostática del medio interno, con los consiguientes efectos deletéreos a corto y largo plazo sobre el estado nutricional. El presente estudio se condujo para evaluar el estado de la provisión de cuidados nutricionales a los recién nacidos atendidos en la Unidad de Terapia Intensiva Neonatal (UTIN) del Hospital Gineco-obstétrico de Guanabacoa (La Habana, Cuba) durante el quinquenio 2000-2004. Se obtuvieron datos sobre el estado nutricional de los recién nacidos atendidos en la UTIN, los problemas de salud concurrentes, las necesidades nutrimentales estimadas, y el estado de los esquemas de Nutrición artificial y Apoyo nutricional instalados corrientemente en el recién nacido. El estudio reveló progresión de la pérdida de peso del recién nacido durante el tiempo de permanencia en la UTIN, comienzo tardío del apoyo nutricional, baja tasa de utilización de técnicas de Nutrición parenteral en los niños en los que la vía oral estaba suspendida 72 horas (o más), e incremento del número de niños desnutridos al egreso de la UTIN. Se emitieron recomendaciones sobre el diseño e implementación de los protocolos pertinentes de evaluación del estado nutricional, el momento del inicio del apoyo nutricional, el diseño, instalación, mantenimiento, monitoreo y retiro de los esquemas de Nutrición artificial, y el uso oportuno y correcto de soluciones parenterales de lípidos.
Alina González Hernández, Lourdes Pupo Portal
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Mayttel De La Paz Luna, Beatriz Basabe Tuero, Daisy Zulueta Torres, Blanca Terry Berro, Sailid Granado Viera, María Eugenia Quintero Alejo, María Victoria Luna Martínez, Mavis Díaz Miranda
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Grasa visceral, circunferencia de la cintura e injerto renal. Asociación con trastornos metabólicos y función renalJustificación: La excesiva ganancia de peso en el trasplantado renal ocurre predominantemente a expensas de la grasa visceral. La medición de la grasa visceral por tanto puede alertar sobre trastornos metabólicos asociados al exceso de peso. Objetivo: Determinar si la circunferencia de la cintura como subrogado de la grasa visceral puede predecir trastornos metabólicos derivados de la resistencia a la insulina, así como la falla del injerto renal. Diseño del estudio: Analítico, transversal. Serie de estudio: Ochenta y ocho pacientes trasplantados (Hombres: 57.9%; Edades >= 60 años: 7.9%; Tiempo promedio de vida del injerto: 6.1 -/+ 5.7 años) atendidos en la Consulta Externa del Servicio de Nefrología del Hospital Clínico quirúrgico “Hermanos Ameijeiras” (La Habana, Cuba). Métodos: La grasa visceral (GV) se midió mediante bioimpedancia eléctrica (BIA). La circunferencia de la cintura (CC) se midió en centímetros alrededor del ombligo. Se estimó la influencia de variables demográficas y clínicas selectas sobre la GV y la CC. A su vez, se evaluó la asociación entre la ganancia de peso, las facetas del Síndrome metabólico (SM) y la función renal, por un lado, y la GV y la CC, por el otro. Las asociaciones de interés se corrigieron según el tiempo de vida del injerto. Resultados: El 34.0% de los trasplantados presentó valores elevados de la CC. La serie de estudio se distribuyó según los terciles de la GV como sigue: Primer tercil: 0 – 5.9 Kg: 35.0%; Segundo tercil: 6.0 – 9.9 Kg: 34.0%; Tercer tercil: >= 10.0 Kg: 31.0%, respectivamente. La GV y la CC se correlacionaron estrechamente. El comportamiento del indicador antropométrico fue independiente de las variables demográficas y clínicas del estudio, y el tiempo de vida del injerto. La GV se asoció con una mayor presencia de SM, proteinuria patológica y filtración glomerular disminuida. La CC solo se asoció con una mayor presencia de la proteinuria patológica. Conclusiones: La GV medida mediante BIA puede ser útil en la predicción de la ocurrencia del SM y daño glomerular con proteinuria concomitante. La utilidad predictiva de la CC pudiera estar afectar por otros factores propios de la historia del trasplantado.
Gerardo Borroto Díaz, Mardia Quintanilla Andino, Malicela Barceló Acosta, Lisandra Cabrera Valdés
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Estado de la desnutrición en el Hospital Clínico Quirúrgico “Hermanos Ameijeiras” de La HabanaIntroducción: La tasa de desnutrición en el Hospital Clínico Quirúrgico “Hermanos Ameijeiras” (La Habana, Cuba) fue del 35.9% en el 2000. En la década transcurrida se redujo la dotación de camas hospitalarias, se reordenó la organización y trabajo de los servicios clínicos y quirúrgicos, y disminuyeron los ingresos hospitalarios. Es probable que estos cambios hayan influido sobre la tasa de desnutrición hospitalaria. Objetivo: Estimar la frecuencia corriente de desnutrición hospitalaria. Diseño: La desnutrición hospitalaria se diagnosticó mediante la Evaluación Subjetiva Global en 460 pacientes ingresados entre Agosto y Diciembre del 2009. Los fenotipos nutricionales se distribuyeron según las variables demográficas, la enfermedad de base, la presencia de cáncer, infección y enfermedad orgánica crónica, los servicios hospitalarios y la estadía hospitalaria. Resultados: La desnutrición hospitalaria fue del 37.8%. La desnutrición fue prevalente entre los mayores de 60 años, aquellos con cáncer, los infectados, y los afectados por una enfermedad orgánica crónica. Los servicios hospitalarios de Gastroenterología, Nefrología y Medicina Interna concentraron los desnutridos. La tasa de desnutrición fue mayor cuando se prolongó la estadía. La situación epidemiológica encontrada fue similar a la descrita hace 8 años atrás. Conclusiones: La desnutrición hospitalaria constituye un importante problema institucional de salud.
Jesús Barreto Penié, Sergio Santana Porbén, Malicela Barceló Acosta, Carmen Martínez González, Luis Garcés García-Espinosa, Darilys Argüelles Barreto, Dayamí de La Cruz Hernández, Beatriz Valdés Girona, Rosa Jiménez Paneque, Abel Pernas
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